«Escribiré mi informe como si contara
una historia, pues me enseñaron siendo niño que la verdad nace de la
imaginación.» Así comienza su relato Genly Ai, enviado al planeta Gueden,
también llamado Invierno por su gélido clima, con el propósito de contactar con
sus habitantes y proponerles unirse a la liga de planetas conocida como el
Ecumen. Los guedenianos tienen una particularidad que los hace únicos: son
hermafroditas, y adoptan uno u otro sexo exclusivamente en la época de celo,
denominada kémmer. En Invierno, Ai conoce a Estraven, un alto cargo que le
mostrará cuán diferente puede llegar a ser una sociedad donde no existe una
diferenciación sexual.
Una vez más me enfrento a un multi premiado
libro de ciencia ficción que termina por decepcionarme. Supongo que por pura estadística
algún día estaré de acuerdo con los jueces de los premios, Nébula, Hugo etc...pero
hoy no va a ser ese día.
Antes de nada quiero dejar claro que
bien podríamos separar esta novela en dos partes. La primera de ellas la parte
aburrida y carente de emociones que es más que prescindible, donde deberemos de
armarnos de paciencia si queremos terminar el libro. Y una segunda parte donde
por fin los personajes actúan y les suceden cosas, y en la que podremos disfrutar
de la amistad que surge entre los dos protagonistas.
De la primera parte tampoco hay mucho
que contar, bueno salvo que seas la señora Le Guin y emplees 150 páginas en no
decir nada. Genly Ai como embajador del Ecumen (una especia de organización
interplanetaria que abarca a la humanidad) debe de convencer a la gente de
Invierno para que estos formen lazos con el resto de la humanidad. Pero cuando
su objetivo está próximo y por fin va a poder entrevistarse con el Rey de
Karhide(uno de los varios países que forman este planeta), su único apoyo en
el gobierno, Estraven, es acusado de alta traición y con ello ve desaparecer
todas sus esperanzas.
Harto de esperar, Genly Ai decide
visitar el cercano país de Orgota, cuya política y forma de actuar de la gente
recuerda muy mucho a un país del antiguo telón de acero. Allí se reencontrará
con un Estraven en el que a pesar de su apoyo nunca terminó de confiar. Tras un
gran recibimiento inicial por parte de las autoridades del lugar, pronto
descubrirá que es usado como instrumento político. Desoyendo el consejo de
Straven para que actúe antes de que sea demasiado tarde, Genly Ai será apresado
y enviado a un campo de trabajo en una de las zonas más desoladas del planeta.
A partir de este momento es cuando la
historia comienza a ganar interés hasta convertirse en un buen relato de
amistad y supervivencia. Estraven acudirá en ayuda de Genly Ain y tras sacarle
del campo de trabajo donde estaba recluido, se verán obligados a emprender un viaje
muy peligroso de más de mil kilómetros en plena estación de invierno, por la
zona más inhóspita de un planeta que casi en su totalidad está congelado, hasta
alcanzar Karhide de nuevo.
Como termina esta última parte es algo
que deberéis averiguar por vosotros mismos si que sois capaces de salir vivos
de la primera parte de la novela.
La historia comienza muy lenta,
demasiado, hasta el punto de volverse en verdad muy pesada. La autora elige el
camino más largo siempre para poder alcanzar sus objetivos, recargando en
exceso la prosa de la narración e incrementando la sensación de pesadez que nos
embarga. Por fortuna en la segunda parte del libro todo discurre de una forma
mucho más ágil y amena.
Como en todo en esta historia los
personajes tienen dos caras. La primera de ellas es plana, muy plana y carente
de emociones. Todos ellos parecen más máquinas que seres humanos. En la segunda
mitad del libro los dos personajes protagonistas nos abren sus almas y por
primera vez podremos vislumbrar humanidad en ellos.
COSAS
QUE ME HAN GUSTADO:
· Hasta
cierto punto me ha parecido bastante interesante el mundo tan distinto al
nuestro que nos plantea Le Guin como base de su trama. Ese ser humano
ambivalente, que no es hombre ni mujer y que igual que los animales sufre un
periodo muy concreto de celo, consiguió enseguida atraer mi atención. Aunque por
desgracia y debido al sopor pronto me vi obligado a perder el interés.
· A
partir de mitad del libro por fin el ritmo de la narración coge un poco de velocidad
y podemos disfrutar de una segunda parte mucho más divertida gracias al relato
de supervivencia de los dos protagonistas.
COSAS
QUE NO ME HAN GUSTADO:
· Sé
que mucha gente no estará de acuerdo con mis palabras, pero no me gusta, o
mejor dicho no va conmigo la forma de escribir de Le Guin. Demasiada verborrea
y rodeos que al final no nos conducen a ninguna parte. Para mi gusto este libro
sufre de un exceso de paja.
· Hasta
mitad de la novela esta se me ha hecho muy pesada de leer. No recordaba un
libro que me hubiera costado tanto su lectura. La trama en su avance abusa de
un exceso de pausa y de una falta de emoción que casi me crispó los nervios.
· Me
fue imposible empatizar con los personajes hasta que llegamos a la segunda
parte de la historia. Antes de que eso suceda no encuentro nada en ellos que
pueda destacar para bien y si muchos defectos bastante remarcables.
CONCLUSIÓN:
La mano izquierda de la oscuridad
termina siendo una novela bastante decente, siempre y cuando seas capaz de
superar el escollo que es su primera mitad. Y cuidado, que no es que estemos
delante de un pequeño obstáculo precisamente. A pesar de los muchos premios recibidos
en su día (una vez más sigo sin comprender el criterio de la gente que otorga
los Hugo, Nébula y demás) no recomendaría su lectura salvo que seas un gran
seguidor de la narrativa de Úrsula K. Le Guin.
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