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martes, 25 de julio de 2017

Diástole, algo más que una historia trillada de vampiros.

SINOPSIS:

Premio Celsius 2012 de la Semana Negra, a la mejor novela fantástica. Finalista del Premio Ignotus 2012 y del Nocte 2012 a la mejor novela de terror. Selección FNAC de Novela policiaca y de terror.

Un extraño forajido escapa de su escondrijo en las ruinas de Chernóbil y atraviesa Europa perseguido por un grupo organizado de asesinos a sueldo de Moscú. Busca a un pintor heroinómano para solicitarle un posado que, en realidad, forma parte de un ritual más antiguo que las civilizaciones.





Emilio Bueso es un autor al que descubrí hace un par de años y que desde entonces me ha dado bastantes alegrías. Así que cuando vi de oferta esta novela que hoy os traigo, no dudé un instante en hacerme con ella.

La trama comienza situándonos en la piel de Jerome. Un pintor muy venido a menos enganchado a las drogas y que malvive como puede gracias a un trabajo igual de horrible que su adicción.

Un día como otro cualquier en su deprimente vida, Jerome recibe la visita de un tipo extraño que le promete pagarle un buen dinero por pintar a su señor durante cuatro noches seguidas. Llevado por el dinero fácil y la necesidad de volver a pintar, Jerome acepta sin pensárselo demasiado ese extraño trato.

Al llegar la primera noche al lugar convenido, una vieja casa señorial situada en mitad de la montaña y que ha vivido momentos mejores, Jerome sentirá casi al instante una sensación extraña que rodea la finca. Pero su ansiedad por pintar de nuevo y el dinero en su bolsillo, harán que Jerome deje de lado sus suspicacias y se adentre en el lugar.

Allí conocerá al hombre que tiene que pintar, Iván. Un tipo de aspecto señorial y edad indefinida, al que rodea un halo de tristeza. Para poder realizar mejor su trabajo, Jerome le pedirá a Iván que se abra a él y le deje dar un vistazo a lo más profundo de su alma, lo que nos conducirá hasta una gran historia de amor y dolor en la que Iván noche a noche ira desmenuzando su ser a un Jerome que volverá a recuperar su amor por la pintura, hasta que por fin le desvele su gran secreto.

Si para Jerome todas las rarezas que rodean a Iván y su sequito no fueran ya suficientes, un grupo paramilitar ruso parece andar detrás de los pasos del hombre y pretenden usarle a él, sin ofrecerle la opción de negarse, como cebo para alcanzar a su presa. Esto conducirá al pintor a un tremendo dilema, terminar la mejor obra de toda su vida o arriesgarse a continuar en la boca del lobo y ser un daño colateral de la guerra que parece existir entre ambos bandos.

Al final tanto la historia de Iván como la de Jerome convergerán en un mismo desenlace, en el que descubrir el destino de ambos personajes recaerá en el lector.

Si algo me ha mostrado Emilio Bueso en todas las novelas suyas que he leído, es un estilo muy personal y donde la realidad siempre supera a la ficción. Ese realismo hace que sus historias, a pesar de ser de fantasía, terror o ciencia ficción, parezcan autenticas, y amigos, eso es algo muy complejo de conseguir. Además, en este caso la novela también fluye de una forma muy natural, por lo que casi podría asegurar que el ritmo narrativo es impecable.

Finalizando con los personajes, son Jerome e Iván los protagonistas, bueno, si no tenemos en cuenta el Talbot de Jerome. En ambos casos su trasfondo es clave para comprender la historia, por lo que no debería sorprendernos lo bien trabajada y la profundidad de la personalidad que observamos en los dos personajes. El resto de personas que aparecen en la historia son menos importantes, salvo quizás la amada de Iván, por su significado en el contexto de este, y su fiel y misterioso mayordomo, del cual me hubiera gustado descubrir algo más.


COSAS QUE ME HAN GUSTADO:

Ø  Siempre que leo un libro de Emilio Bueso me quedo con la sensación de estar leyendo algo especial. A veces sus historias podrán conquistarme más o menos, pero su estilo nunca me decepciona. Su prosa y su narrativa conjugan con maestría elegancia con una pizca de osadía y crudeza, pero sin acercarse a lo que podríamos llamar simple vanidad.
Ø  La ambientación me ha aparecido muy destacable. Tal vez sea porque los lugares nombrados siempre me han llamado la atención, de todos modos creo que es un aspecto muy bien trabajado por el autor.
Ø   A pesar de partir de un punto de partida muy manido como son los vampiros, la trama desprende originalidad y en muchos momentos un halo de tensión que te atrapa y te anima a seguir leyendo.

COSAS QUE NO ME HAN GUSTADO:

Ø  Toda la parte final se vuelve demasiado previsible y hace que todo el conjunto pierda un poco de brillantez. No es nada grave, pero al menos en mi caso si ha sido un apartado que me ha dejado un regusto amargo.

CONCLUSIÓN:

Diástole es una gran novela de fantasía y terror, eso que vaya por delante. No es que Emilio Bueso haya reinventado el concepto del vampiro, pero como en el cuadro de la historia le ha dado su propio estilo al mito. Un estilo realista, crudo y que nos ofrece una trama más original de lo que podría parecer y dos buenos personajes como protagonistas. Su propia virtud se le puede considerar su mayor defecto, y es que un género tan trillado como este genera muchos prejuicios a un buen número de lectores, aunque en este caso como ya he comentado estamos ante algo más que una simple historia de vampiros. ¿Recomendable? Sin duda. Buena prosa, trama original y buenos personajes, ¿necesitáis algo más?

PUNTUACIÓN: 7.75 sobre 10.




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